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miércoles, 8 de junio de 2016

¿Y las acciones en USA?

¿Y las acciones en USA?
Durante la semana vi un dato que me llamó fuertemente la atención: de las últimas 21 semanas, durante 17 de ellas hemos tenido salidas de capital de fondos que invierten en acciones estadounidenses. Esto se da a pesar de que índices accionarios como el S&P 500, siguen subiendo. Es una situación contra intuitiva, pero que entre los analistas empieza a ser un punto de debate adicional para saber qué puede pasar con el mercado accionario en Estados Unidos en el futuro cercano.

Muchos habrán leído que al evaluar indicadores propios de las acciones, como relación precio-ganancias; precio contra valor en libros; precios contra ventas; etc, los mismos muestran niveles que pueden estar muy altos. Y en esto basan sus afirmaciones de que la bolsa norteamericana tendrá no tan buenos días durante los próximos meses de verano.

¿La pregunta lógica es, por qué sigue subiendo la bolsa? Muchos dicen que eso se basa en la recompra de acciones que hacen las mismas empresas, la cual tiene un detalle que no se debe dejar pasar por alto, y es que muchas empresas, a pesar de su liquidez, han hecho esta recompra de acciones basados en deuda. Esto tiene una lógica financiera, y es que con las tasas tan bajas en el mundo desarrollado, aumenta métricas financieras empresariales, como el WACC, con lo que el costo del capital de la empresa es menor, y así, el precio de la empresa sube. Además, y sin volverme excesivamente técnico, con mayor deuda se incrementa el apalancamiento financiero, y eso lleva a que por cada dólar vendido, haya mayor utilidad.

La pregunta es lo que pasa si la FED sube sus tasas de interés. Obviamente sube el costo del endeudamiento, y debo decidir qué hacer: sigo con el crédito abierto o lo repago. Puedo hacer lo último, y si soy una empresa norteamericana, tengo el efectivo suficiente guardado para hacerlo. Pero si saco efectivo (un activo), debo compensarlo con una bajada del capital (por la relación básica contable según la cual Activos es igual a la suma de Pasivos más Capital), lo cual disminuye el valor de la empresa, en ese momento.

Así las cosas, la duda que se empieza a expandir es, qué van a hacer las empresas en este ambiente. Y por eso muchos analistas le apuestan a la corrección accionaria norteamericana. Ahora bien, esa es una de las posiciones existentes. Debe tenerse en cuenta que los mercados tienen ciclos, de subida y de bajada…y que tarde o temprano los índices accionarios norteamericanos deben caer, luego de lo alto que han subido desde 2009. Y eso es absolutamente normal.  

Mirando otras variables

Mirando otras variables
Los datos que salen semana tras semana llevan a pensar mucho sobre el campo actual en el que estamos parados, y mucho más sobre el impacto que puede tener en algunos activos de inversión. La semana pasada me refería a las acciones en Estados Unidos, y sigo enfocándome en ellas.

Los reportes financieros más recientes muestran que en los últimos 12 meses, las 1.500 empresas más grandes en USA, exceptuando las financieras, añadieron 517 billones de dólares de deuda neta, lo cual, a su vez, llevó al endeudamiento total a 6.6 trillones de dólares, la más grande de toda la historia de las empresas norteamericanas.

A su vez, el efectivo de las empresas, viene disminuyendo: en la actualidad son solo 1.8 trillones de dólares, lo que representa que la relación efectivo vs deuda, alcance el 28%, el más bajo desde la crisis de 2008, cuando se ubicaba en el 23% (los años previos a la crisis estuvo alrededor de 26%). Algunos analistas, como Lance Roberts, notan sin embargo, que la mayoría de este efectivo se encuentra en operaciones externas, en algunas ocasiones de difícil repatriación hacia Estados Unidos.

¿Todo esto en qué se puede traducir? Sencillo, en que la FED debería ser más cauta con cualquier movimiento que haga con la tasa de interés. Si “se le va la mano”, podría afectar el tema corporativo, un escenario para el cual creo que hoy por hoy no estamos preparados. Entonces, la mejoría de las variables económicas norteamericanas sí es necesaria para que la FED suba la tasa, pero no es suficiente. Es necesario porque se necesita que mejoren, pero no son suficientes por sí solas, porque se necesita que esos mejores resultados se traduzcan en variables corporativas positivas.

Es decir, el óptimo de mejoría de variables como crecimiento económico, nivel de empleo, productividad, etc, estará listo para cuando puedan cubrir los mayores costos que generen créditos más caros por una tasa de interés más alta. En términos sencillos, el mayor costo marginal del crédito debe “pagarse” por sí solo. Si la mejora económica no se traduce mayores ingresos para las empresas, manteniendo relaciones financieras invariadas, probablemente no sea tan fácil para la FED decidirse a subir la tasa.

Matemática sencilla: un 0.25% de incremento en el costo del crédito sobre una deuda de 6.6 trillones de dólares, significa un costo adicional de 16.5 billones de dólares por año. Y este monto es, justamente, lo que deben de generar de más las empresas norteamericanas para que la ecuación total cuadre y sea, quizá un poco más para la Reserva Federal, la decisión de tasas de interés.     

My Thoughts on Markets

De todo lo que he leído y analizado recientemente, este es el escenario que me he planteado que más me gusta sobre los mercados financieros:

·      Creo que efectivamente una corrección en las acciones norteamericanas es posible. Los indicadores que gustan a los analistas, como las relaciones PE, PV, entre otras, están altas. Las ganancias (E), llevan seis trimestres consecutivos cayendo, y es muy factible que eso lleve a una caída del indicador PE. Es claro que, es más fácil que caiga P, a que suba E, en una economía en desaceleración.

·      La pregunta es para dónde se va el dinero que sale de acciones cuando las acciones caigan. Me cuesta mucho pensar que alguien, en sus cabales, tome la decisión de invertir en un bono del Tesoro a 10 años a la ¨súper¨ tasa de 1.8% en que se encuentran en la actualidad, especialmente aquellos administradores de inversiones que necesitan retornos altos (léase, fondos de pensiones que empiezan a tener una gran cantidad de personas jubiladas, provenientes de los baby boomers). Así, me inclino a pensar que el destino serán tres: acciones europeas, probablemente acciones japonesas, y activos de mercados emergentes.


·      Con lo anterior, estoy ampliamente convencido que los bonos colombianos son un activo atractivo, tanto por flujos como por fundamentales económicos. Si creemos que la inflación en Colombia está llegando a un pico, dentro de poco empezará a caer y con ella, lo harán las tasas. Y eso debe llevar las tasas de los bonos a la baja, con el impacto positivo en el precio de estas inversiones. Determinar una rentabilidad potencial es muy difícil, pero no nos extrañemos de ver retornos cercanos al 15% en bonos de corto a mediano plazo, por un efecto de valoración a precios de mercado.

·      Algunos cuestionamientos para esta teoría serán: el paro agrario y el paro camionero, que han hecho subir en centrales de abastos algunos productos; la reforma tributaria con el aumento del IVA; el precio del dólar que aún puede tener algunas presiones; por citar las más evidentes. Creo que ninguna de estas representa una presión fuerte, sino que serán temas pasajeros que no deberían afectar la tendencia decreciente de la inflación.

·      La gran duda es la subida de tasas de la FED. Debe ser un tema que se va a dar temprano que tarde. Pero un indicador que me llamó la atención fue el relacionado con la deuda de las empresas norteamericanas: 6.6 trillones de dólares, habiendo añadido 517 mil millones de dólares en los últimos 12 meses; y con la relación más baja de efectivo a deuda desde antes de la crisis financiera de 2008. Esto me llevó a pensar que un aumento de 0.25% en el costo del crédito, implicaría que al año, las empresas deben tener la capacidad de generar 17 billones de dólares adicionales para poder pagar, únicamente, los intereses de dicha deuda. Considero que, si la FED hace bien el ejercicio, subirá la tasa cuando vea que este mayor valor de la deuda es autosostenible, es decir, que las empresas pueden crear el capital para pagarlo.

·      Mucho se habla de petróleo y de las decisiones de la OPEP. No hay tal. La OPEP parece que no se va a poner de acuerdo sobre nada trascendental. Es más, ya casi ni importa porque, desde hace algún tiempo es Rusia el mayor productor de petróleo. Por cierto, el petróleo no es una piscina debajo de la tierra. Es una roca porosa que si se deja de extraer, se seca. Por eso se debe seguir sacando el petróleo de los pozos abiertos. Esto simplemente para decir que, si bien creo que el precio del petróleo no debía ser 25 dólares, tampoco debe ser 50 dólares ya mismo. Alrededor de 40 sería un precio bueno, antes de que, por efectos de mediano plazo, sí se estabilice entre 50 y 60 dólares, pero eso debería tomar algún tiempo.

·       Si todo lo anterior se cumple, lo más lógico sería ver un dólar, hacia final de año alrededor de $2.800


·      Eso sí, sigo pensando, como desde hace mucho tiempo atrás, que Brasil va a terminar como Grecia después de los Olímpicos de 2004…es decir, con un fuerte dolor de cabeza por costear algo que no deberían haber costeado.  En Grecia los efectos se vieron 6 años después…no sé a Brasil cuanto tiempo le tome la caída completa.